El Banco de España ha señalado este miércoles que los indicadores relativos a la industria apuntan a una „prolongación de la fase reciente de dinamismo de la actividad”, comportamiento similar al gasto de las familias en bienes de consumo, que habría mantenido un „elevado” ritmo a principios de 2016, informó el periódico ABC.es.
El boletín económico de febrero de la entidad supervisora recuerda sin embargo que los índices de confianza han mostrado „comportamientos dispares” en enero, ya que si el del comercio minorista se mantuvo en el nivel de diciembre el de los consumidores experimentó un cierto retroceso.
Con todo, la entidad cree que la demanda interna privada ha podido tener una „contribución elevada” a la expansión del PIB en el último trimestre de 2015 (que creció un 0,8 según el avance del INE), aunque la información desagregada y revisada no se conocerá hasta el 25 de febrero.
En cuanto al empleo, recuerdan que en enero se ha prolongado la evolución favorable de los indicadores, y que los incrementos han sido „generalizados” en los principales sectores de actividad, si bien el ritmo en servicios de mercado y construcción se ha moderado respecto a diciembre.
También se señala que la información más reciente acerca de la evolución de la negociación colectiva, referida a enero de este año, apunta a una „cierta aceleración” de los aumentos salariales.
Según el Banco de España las decisiones de gasto de los hogares se vieron favorecidas, en el tramo final de 2015, por la mejora de las condiciones financieras, y parecen haber mantenido un „elevado dinamismo” a comienzos de 2016. Por su parte, los indicadores relativos a la industria apuntan hacia una prolongación de la fase reciente de dinamismo de la actividad.
Entre la información cualitativa, destacan que el nivel del PMI de manufacturas comenzó el año con un notable aumento, hasta alcanzar su mayor nivel desde mayo de 2015. Además, la utilización de la capacidad productiva se incrementó al inicio de 2016, según la fuente citada.